Los servicios que brinda un abogado de inmigración y extranjería en E.E.U.U.

Cuando un individuo o una familia está considerando opciones migratorias, un abogado de inmigración ofrece consultoría inicial para evaluar su situación. En esta etapa, se discuten detalles como el historial migratorio, la situación familiar y las aspiraciones del cliente. Basándose en esta información, el abogado identifica las posibles rutas de inmigración y las probabilidades de éxito, al mismo tiempo que establece un plan claro sobre los siguientes pasos.

Estas visas están diseñadas para aquellos que desean permanecer en Estados Unidos por un período limitado por razones turísticas, laborales, educativas, entre otras.

Un abogado de inmigración no solo ayuda a determinar cuál es la visa adecuada para la situación del solicitante, sino que también guía en la recopilación de documentos, el llenado de formularios y la preparación para las entrevistas consulares.

A diferencia de las visas temporales, las visas de inmigrante buscan ofrecer una residencia permanente en EE.UU.

Estas pueden obtenerse a través de ofertas laborales o relaciones familiares con ciudadanos o residentes permanentes.

No obstante, este proceso ciertamente puede ser arduo y prolongado, por lo que aquí el abogado debe trabajar estrechamente con el cliente, asegurando que todas las etapas se cumplan correctamente y en tiempo.

La posibilidad de reunir a las familias es fundamental en el sistema migratorio de EE.UU. Un ciudadano o residente puede solicitar a ciertos miembros de su familia, como cónyuges, hijos o padres. El abogado de inmigración ayuda a entender las categorías de preferencia, los tiempos de espera y garantiza que la petición se realice con todas las evidencias y formularios necesarios.

Algunos individuos, ya presentes en Estados Unidos bajo una visa temporal, pueden ser elegibles para ajustar su estatus a residente permanente sin tener que salir del país. Este proceso tiene múltiples requisitos y etapas. El abogado asiste en cada paso, desde la solicitud inicial hasta la entrevista final con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).

Para quienes buscan ingresar a Estados Unidos desde el exterior, el proceso consular es esencial. Esto implica solicitar una visa o residencia en una embajada o consulado estadounidense en su país de origen. Con frecuencia, hay entrevistas y verificaciones adicionales. El abogado guía en la preparación de documentos, la solicitud y brinda asesoría sobre cómo abordar posibles preguntas o preocupaciones.

Estar bajo la amenaza de una posible deportación de los Estados Unidos puede ser una experiencia aterradora.

Aquí, el abogado de inmigración juega un papel crucial al representar al cliente en audiencias ante un juez de inmigración. Durante este proceso el experto en extranjería presenta evidencia y argumentos, buscando alternativas como el asilo o la cancelación de la remoción, y protegiendo los derechos del individuo.

El asilo es una salvaguarda para aquellos que han enfrentado o temen enfrentar persecución en su país natal debido a raza, religión, nacionalidad, opinión política o pertenencia a un grupo social particular.

La solicitud de asilo es detallada y requiere una evidencia sólida. Un abogado especializado garantiza que se presente un caso robusto, coordinando con expertos, recabando testimonios y preparando al cliente para entrevistas.

La naturalización es el proceso mediante el cual un residente permanente (titular de una tarjeta verde) se convierte en ciudadano estadounidense. Esta transición requiere que el individuo cumpla con ciertos requisitos, como un período mínimo de residencia y un conocimiento básico del gobierno y la historia de EE.UU. El abogado de inmigración guía al solicitante a través de cada paso, ayudándolo con la preparación para el examen de ciudadanía y la entrevista, además de asegurarse de que se cumplan todos los requisitos.

Existen ciertas circunstancias o infracciones pasadas que pueden hacer que una persona sea inadmisible en EE.UU. Las exenciones son mecanismos que permiten a estos individuos solicitar un “perdón” para superar estos impedimentos. Un abogado especializado asiste en la preparación y presentación de estas exenciones, demostrando por qué debería otorgarse el perdón y cómo el rechazo podría causar dificultades extremas a un ciudadano o residente estadounidense relacionado.

Las cortes de inmigración son donde se deciden muchos casos de remoción o deportación. Tener representación legal en estos escenarios es crucial. El abogado defiende al cliente presentando argumentos, pruebas y testigos, y negociando posibles soluciones con el gobierno. También se encargan de comprender las complejidades y constantes cambios en la ley de inmigración para proporcionar la mejor defensa posible.

DACA es una política que protege de la deportación a aquellos que llegaron a EE.UU. siendo niños y cumplan con ciertos criterios. Además, les proporciona un permiso de trabajo.

Un abogado de inmigración ayuda en el proceso de solicitud, asegurando que se presenten todos los documentos necesarios, y también asiste en la renovación del estatus DACA cuando es necesario.

El TPS es otorgado a nacionales de países que enfrentan condiciones inseguras, como conflictos armados o desastres naturales. Este estatus permite a los beneficiarios permanecer y trabajar en EE.UU. temporalmente.

El abogado guía al solicitante a través del proceso de solicitud y renovación, garantizando que se cumplan todos los requisitos.

Las empresas que emplean a trabajadores extranjeros deben cumplir con estrictas regulaciones para asegurarse de que están operando dentro de la ley. Esto incluye la verificación del estatus migratorio de los empleados y el cumplimiento de ciertas obligaciones laborales. Un abogado de inmigración asesora a las empresas sobre cómo cumplir con estas normas y evitar posibles sanciones.

Si una solicitud migratoria es denegada, no necesariamente significa el final del camino. Muchas decisiones pueden ser apeladas ante una autoridad superior.

En este proceso, el abogado presenta argumentos adicionales, pruebas o aclaraciones, buscando revertir la decisión original o al menos obtener una revisión exhaustiva del caso.